El sexting es un
fenómeno reciente, entre los adolescentes, que consiste en enviar una imagen de alto
contenido sexual de sí mismo a su pareja o a alguien con quien quiere flirtear
usando el teléfono móvil. El resultado de esta práctica puede generar serios
problemas que van desde la pérdida de la privacidad, la merma de la imagen, hasta
la victimización en el marco de una espiral de
ciberbullying.
Se ha manifestado en países como:
Australia, Nueva Zelanda, Estados Unidos, el Reino Unido, Puerto Rico, México,
y Argentina. Empezó a ser considerado como un problema serio a raíz de un
tristemente sonado caso de suicidio de una alumna de preparatoria de 18 años de
edad, ocurrido en los Estados Unidos, que fue víctima de una situación de este
tipo. Es el caso de Jesse Logan, quien se vio envuelta en un escándalo porque
en su escuela circulaba una imagen en la que aparecía desnuda en los celulares
de un gran número de alumnos.
Esta
situación, aunada a las burlas y bullying de que fue objeto, le causó un grave
estado depresivo que la obligó a abandonar sus estudios y posteriormente, a quitarse la vida (Mattey y Mattey, 2009;
Rommelmann, 2009). De acuerdo con las autoridades del estado donde ocurrió, el
sexting una práctica considerada como delito de pornografía infantil.
El
fenómeno del sexting también es
considerado un problema educativo. Se han reportado casos en que las o los
jóvenes involucrados en este problema son expulsados o suspendidos de sus
escuelas o ellos mismos se autoexcluyen para evitar las burlas. En suma es un
de varios factores que pueden conducir a los alumnos a situaciones de fracaso académico.
Ocho de cada 10 adolescentes de 15
a 16 años posee su propio teléfono móvil, con el que la mayoría (más del 88%)
hace fotografías, que envía a otras personas (48,2%) y publica en Internet
(20,8%).
Algunas explicaciones de por qué
ocurre:
- Creen que una imagen en un terminal móvil está segura y no imaginan que puede ocurrir un robo, un error, una broma, un extravío… o la voluntad de su propietario para hacerlo público.
- Confían plenamente en la discreción y en el amor eterno profesado. Carecen de experiencia suficiente que les invite a pensar en la vida, las personas cambian por muy diversos factores.
- Sienten cierta presión de grupo que les lleva a ganar notoriedad y aceptación, esto aunado a la plenitud hormonal, puede generar combinaciones peligrosas.
- Las influencias y modelos sociales distan del recato. El “desnudeo” es algo común, hasta cierto punto normalizado.
- Desconocen las consecuencias que para su vida puede llegar a tener el hecho de que esa imagen comprometida sea de dominio público.
- La natural falta de percepción del riesgo que acompaña a la adolescencia y el espíritu transgresor desencadenan ciertos desafíos. En algunos casos resulta simplemente divertido, en otros, sirve para coquetear o dar otro contenido a una relación.
René Oswaldo Marrufo Manzanilla
Trabajo elaborado para obtener el grado de Maestro en Investigación Educativa
Tesis dirigida por
Ángel Martín Aguilar Riveroll
Mérida de Yucatán
Marzo de 2012
No hay comentarios.:
Publicar un comentario